El alma pionera de la imagen submarina en Donostia
Hablar de Francisco Pizarro Asenjo es hablar del origen mismo del Cimasub, del impulso a las actividades subacuáticas en Gipuzkoa y del amor incondicional al mar y a sus misterios. Fundador del Ciclo Internacional de Cine Submarino de San Sebastián y cofundador de la Sección de Actividades Subacuáticas de la Real Sociedad, su nombre está profundamente ligado a la historia del buceo en nuestro territorio.
Desde su infancia en las desaparecidas casas frente a la playa de Ondarreta, Paco —como cariñosamente le conocemos— desarrolló una pasión que marcaría su vida y la de muchos otros. Fue precisamente en esas aguas donde, siendo niño, descubrió el fondo marino gracias a un curioso encuentro con un buceador francés que le prestó unas gafas y le enseñó a mirar hacia abajo, hacia ese universo azul que lo cautivaría para siempre.
Pero su historia no se quedó en la orilla. Sin apenas medios y en tiempos donde el buceo era una actividad casi desconocida, Francisco Pizarro se lanzó a construir una comunidad. Así nació la Sección de Subacuáticas de la Real Sociedad, con él como motor indiscutible. Desde allí impulsó proyectos, creó puentes con otras federaciones y formó parte activa del nacimiento de la Federación Guipuzcoana de Actividades Subacuáticas —de la que fue primer presidente— y la Federación Española (FEDAS), además de colaborar estrechamente con organismos internacionales como la CEMAS.
La gran obra de su vida, sin embargo, ha sido el Ciclo Internacional de Cine Submarino de San Sebastián (Cimasub), que dirigió durante 35 años desde su fundación en 1975. Fue el primer ciclo o festival de cine submarino que se celebró en el mundo, una iniciativa pionera nacida con apenas 8.000 pesetas de presupuesto y una idea revolucionaria: mostrar al público general, a través del cine, la belleza y riqueza de los fondos marinos. Lo que empezó como una propuesta casi artesanal, con películas cedidas por embajadas extranjeras, se convirtió en un referente internacional. Hoy, medio siglo después, el Cimasub sigue vivo, proyectando la pasión de Paco por el mar a través de cada fotograma.
Por su compromiso, el Ayuntamiento de San Sebastián le concedió en 1998 la Medalla al Mérito Ciudadano, el premio más importante que recibió y del que se sentía más orgulloso. Este reconocimiento se le otorgó por sus años al frente del ciclo y por llevar con orgullo el nombre de Donostia por el mundo entero.
Su labor no pasó desapercibida fuera de nuestras fronteras. Recibió reconocimientos en lugares tan diversos como Antibes (Francia), Estambul (Turquía), Cozumel (México), Berre-l'Étang (Francia) o Valladolid, consolidando su figura como uno de los grandes embajadores internacionales del cine submarino y de la conservación marina.
Por todo ello, desde el Cimasub quisimos rendir homenaje a su legado creando el Premio Francisco Pizarro, un galardón muy especial que entregamos cada año a personas destacadas del mundo de la imagen submarina. No se trata solo de un reconocimiento profesional, sino de un gesto cargado de admiración y gratitud hacia quienes, como hizo Paco, se sumergen no solo en el agua, sino en la tarea de inspirar, enseñar y emocionar.
El Premio Francisco Pizarro no es solo un nombre. Es un símbolo. Es nuestra forma de decir "gracias" a quienes, con una cámara en la mano y un corazón lleno de azul, siguen los pasos de aquel niño curioso de Ondarreta que soñó con mostrar al mundo lo que había bajo las olas.
Premio Especial Francisco Pizarro
El Premio Especial Francisco Pizarro es un homenaje que el Ciclo Internacional de Cine Submarino de Donostia – San Sebastián (CIMASUB) entrega cada año a una figura destacada en el ámbito de la imagen submarina. Este reconocimiento lleva el nombre de Francisco “Paco” Pizarro, impulsor incansable del Cimasub, pionero del cine submarino y gran referente en la divulgación del mundo subacuático.
Con este galardón, desde la Sección de Actividades Subacuáticas de la Real Sociedad queremos mantener viva la memoria de nuestro amigo, compañero y maestro Paco, rindiendo tributo a quienes, como él, han dedicado su vida a mostrar la belleza, diversidad y fragilidad de los océanos a través de la imagen.
El premio reconoce tanto trayectorias profesionales excepcionales como contribuciones significativas en la divulgación y conservación del medio marino. Año tras año, el Cimasub rinde así un merecido agradecimiento a personas cuya obra ha dejado huella en el mundo de la imagen submarina, del documental, de la fotografía o de la comunicación.
A continuación, puedes conocer a las personas que han recibido este reconocimiento en ediciones anteriores del Cimasub.
El alma pionera de la imagen submarina en Donostia
Hablar de Francisco Pizarro Asenjo es hablar del origen mismo del Cimasub, del impulso a las actividades subacuáticas en Gipuzkoa y del amor incondicional al mar y a sus misterios. Fundador del Ciclo Internacional de Cine Submarino de San Sebastián y cofundador de la Sección de Actividades Subacuáticas de la Real Sociedad, su nombre está profundamente ligado a la historia del buceo en nuestro territorio.
Desde su infancia en las desaparecidas casas frente a la playa de Ondarreta, Paco —como cariñosamente le conocemos— desarrolló una pasión que marcaría su vida y la de muchos otros. Fue precisamente en esas aguas donde, siendo niño, descubrió el fondo marino gracias a un curioso encuentro con un buceador francés que le prestó unas gafas y le enseñó a mirar hacia abajo, hacia ese universo azul que lo cautivaría para siempre.
Pero su historia no se quedó en la orilla. Sin apenas medios y en tiempos donde el buceo era una actividad casi desconocida, Francisco Pizarro se lanzó a construir una comunidad. Así nació la Sección de Subacuáticas de la Real Sociedad, con él como motor indiscutible. Desde allí impulsó proyectos, creó puentes con otras federaciones y formó parte activa del nacimiento de la Federación Guipuzcoana de Actividades Subacuáticas —de la que fue primer presidente— y la Federación Española (FEDAS), además de colaborar estrechamente con organismos internacionales como la CEMAS.
La gran obra de su vida, sin embargo, ha sido el Ciclo Internacional de Cine Submarino de San Sebastián (Cimasub), que dirigió durante 35 años desde su fundación en 1975. Fue el primer ciclo o festival de cine submarino que se celebró en el mundo, una iniciativa pionera nacida con apenas 8.000 pesetas de presupuesto y una idea revolucionaria: mostrar al público general, a través del cine, la belleza y riqueza de los fondos marinos. Lo que empezó como una propuesta casi artesanal, con películas cedidas por embajadas extranjeras, se convirtió en un referente internacional. Hoy, medio siglo después, el Cimasub sigue vivo, proyectando la pasión de Paco por el mar a través de cada fotograma.
Por su compromiso, el Ayuntamiento de San Sebastián le concedió en 1998 la Medalla al Mérito Ciudadano, el premio más importante que recibió y del que se sentía más orgulloso. Este reconocimiento se le otorgó por sus años al frente del ciclo y por llevar con orgullo el nombre de Donostia por el mundo entero.
Su labor no pasó desapercibida fuera de nuestras fronteras. Recibió reconocimientos en lugares tan diversos como Antibes (Francia), Estambul (Turquía), Cozumel (México), Berre-l'Étang (Francia) o Valladolid, consolidando su figura como uno de los grandes embajadores internacionales del cine submarino y de la conservación marina.
Por todo ello, desde el Cimasub quisimos rendir homenaje a su legado creando el Premio Francisco Pizarro, un galardón muy especial que entregamos cada año a personas destacadas del mundo de la imagen submarina. No se trata solo de un reconocimiento profesional, sino de un gesto cargado de admiración y gratitud hacia quienes, como hizo Paco, se sumergen no solo en el agua, sino en la tarea de inspirar, enseñar y emocionar.
El Premio Francisco Pizarro no es solo un nombre. Es un símbolo. Es nuestra forma de decir "gracias" a quienes, con una cámara en la mano y un corazón lleno de azul, siguen los pasos de aquel niño curioso de Ondarreta que soñó con mostrar al mundo lo que había bajo las olas.
Premio Especial Francisco Pizarro
El Premio Especial Francisco Pizarro es un homenaje que el Ciclo Internacional de Cine Submarino de Donostia – San Sebastián (CIMASUB) entrega cada año a una figura destacada en el ámbito de la imagen submarina. Este reconocimiento lleva el nombre de Francisco “Paco” Pizarro, impulsor incansable del Cimasub, pionero del cine submarino y gran referente en la divulgación del mundo subacuático.
Con este galardón, desde la Sección de Actividades Subacuáticas de la Real Sociedad queremos mantener viva la memoria de nuestro amigo, compañero y maestro Paco, rindiendo tributo a quienes, como él, han dedicado su vida a mostrar la belleza, diversidad y fragilidad de los océanos a través de la imagen.
El premio reconoce tanto trayectorias profesionales excepcionales como contribuciones significativas en la divulgación y conservación del medio marino. Año tras año, el Cimasub rinde así un merecido agradecimiento a personas cuya obra ha dejado huella en el mundo de la imagen submarina, del documental, de la fotografía o de la comunicación.
A continuación, puedes conocer a las personas que han recibido este reconocimiento en ediciones anteriores del Cimasub.