Un Ciclo Internacional de Cine Submarino diferente, pero como siempre muy emocionante
Así es. Posiblemente las dificultades encontradas en el camino para organizar el certamen, la gran cantidad de interrogantes surgidos hasta llegar hasta aquí, todos los cambios de planes y las noches sin dormir, han hecho que la edición de este año se haya vivido con mayor intensidad.
El público Donostiarra, como viene siendo habitual estos últimos años, se ha volcado con nuestro certamen. La incógnita sobre este tema, dada la situación de pandemia, también se hacía notar en los días previos, al igual que en todo el resto de procesos en la organización. Pero una vez más, el Teatro Principal ha colgado el cartel de “Completo” y salvo el jueves que quedo alguna butaca libre, el resto de los días se ha llenado de calor y cariño por nuestro Ciclo.
Esta edición en la que se han duplicado la cantidad de trabajos presentados respecto al 2018, la calidad de los cortos y documentales ha sido la protagonista. Los asistentes han destacado el alto nivel que se ha podido ver en la pantalla del Teatro Principal. Pero sobre todo la variedad de estilos y géneros en los que hemos podido conocer más de cerca lo que está sucediendo en nuestros mares. Mostrando tanto su belleza infinita como la crudeza del sufrimiento en forma de grito de auxilio por sobrevivir a la extinción y al envenenamiento.
Se ha echado mucho de menos a los galardonados y participantes que nos visitan en San Sebastián cada año por estas fechas. Poder compartir estos días con ellos y verlos subidos al escenario para recoger su tan preciada “Barandilla de la Concha”. Pero esta pandemia nos ha obligado a reinventarnos y a pesar de no poder tenerlos aquí físicamente, si los hemos sentido cerca gracias a los vídeos de agradecimiento que nos han mandado y que hemos podido proyectar en el Teatro Principal. Vídeos que, por otra parte, han dado pie a la creatividad y a apoyar aún más el mensaje de sus metrajes, defendiendo el cuidado de nuestros mares.
Queremos acordarnos de todas las personas que se han quedado fuera y no han podido disfrutar de la belleza de nuestros mares. Les recordamos que el Ciclo Internacional de Cine Submarino sigue su camino y estaremos proyectando en diferentes pueblos de Gipuzkoa en diciembre y durante todo el 2021. Informaremos de ello en nuestra web.
Agradecer al Aquarium y a la Fundación de nuestra querida Real Sociedad su gran trabajo en la organización del Txikiciclo, que este año también hemos conseguido salvar con total seguridad. Niños y niñas de colegios de San Sebastián han podido disfrutar de las maravillas del mar y les hemos podido transmitir la necesidad de cuidarlo y respetarlo. El año pasado tuvimos a más de mil doscientos pequeños en toda Gipuzkoa. Este año nos ha frenado, pero esperamos que en 2021 podamos recuperar el ritmo y hacer crecer esta cifra. Ellos son los futuros cuidadores de nuestros mares y queremos enseñarles a hacerlo lo mejor posible.
Solo podemos dar las gracias a todas y todos. Al público asistente. A todo el equipo de Donostia Kultura, especialmente del Teatro Principal por el gran trabajo que hacen cada día para que el cine sea un lugar seguro. A nuestros patrocinadores, instituciones y colaboradores, porque ahora más que nunca se han volcado con nosotros. A los medios de comunicación por su apoyo constante. A todos los voluntarios y voluntarias y a los compañeros de Subacuáticas de la Real Sociedad por estar siempre ahí para todo lo que haga falta. Y especialmente, gracias a los participantes por compartir con nosotros su talento, su pasión y su amor por el océano. Ellas, ellos y sus trabajos son el corazón de nuestro Ciclo.
Seguimos en marcha, nos vemos en los cines. Buena mar.
Así es. Posiblemente las dificultades encontradas en el camino para organizar el certamen, la gran cantidad de interrogantes surgidos hasta llegar hasta aquí, todos los cambios de planes y las noches sin dormir, han hecho que la edición de este año se haya vivido con mayor intensidad.
El público Donostiarra, como viene siendo habitual estos últimos años, se ha volcado con nuestro certamen. La incógnita sobre este tema, dada la situación de pandemia, también se hacía notar en los días previos, al igual que en todo el resto de procesos en la organización. Pero una vez más, el Teatro Principal ha colgado el cartel de “Completo” y salvo el jueves que quedo alguna butaca libre, el resto de los días se ha llenado de calor y cariño por nuestro Ciclo.
Esta edición en la que se han duplicado la cantidad de trabajos presentados respecto al 2018, la calidad de los cortos y documentales ha sido la protagonista. Los asistentes han destacado el alto nivel que se ha podido ver en la pantalla del Teatro Principal. Pero sobre todo la variedad de estilos y géneros en los que hemos podido conocer más de cerca lo que está sucediendo en nuestros mares. Mostrando tanto su belleza infinita como la crudeza del sufrimiento en forma de grito de auxilio por sobrevivir a la extinción y al envenenamiento.
Se ha echado mucho de menos a los galardonados y participantes que nos visitan en San Sebastián cada año por estas fechas. Poder compartir estos días con ellos y verlos subidos al escenario para recoger su tan preciada “Barandilla de la Concha”. Pero esta pandemia nos ha obligado a reinventarnos y a pesar de no poder tenerlos aquí físicamente, si los hemos sentido cerca gracias a los vídeos de agradecimiento que nos han mandado y que hemos podido proyectar en el Teatro Principal. Vídeos que, por otra parte, han dado pie a la creatividad y a apoyar aún más el mensaje de sus metrajes, defendiendo el cuidado de nuestros mares.
Queremos acordarnos de todas las personas que se han quedado fuera y no han podido disfrutar de la belleza de nuestros mares. Les recordamos que el Ciclo Internacional de Cine Submarino sigue su camino y estaremos proyectando en diferentes pueblos de Gipuzkoa en diciembre y durante todo el 2021. Informaremos de ello en nuestra web.
Agradecer al Aquarium y a la Fundación de nuestra querida Real Sociedad su gran trabajo en la organización del Txikiciclo, que este año también hemos conseguido salvar con total seguridad. Niños y niñas de colegios de San Sebastián han podido disfrutar de las maravillas del mar y les hemos podido transmitir la necesidad de cuidarlo y respetarlo. El año pasado tuvimos a más de mil doscientos pequeños en toda Gipuzkoa. Este año nos ha frenado, pero esperamos que en 2021 podamos recuperar el ritmo y hacer crecer esta cifra. Ellos son los futuros cuidadores de nuestros mares y queremos enseñarles a hacerlo lo mejor posible.
Solo podemos dar las gracias a todas y todos. Al público asistente. A todo el equipo de Donostia Kultura, especialmente del Teatro Principal por el gran trabajo que hacen cada día para que el cine sea un lugar seguro. A nuestros patrocinadores, instituciones y colaboradores, porque ahora más que nunca se han volcado con nosotros. A los medios de comunicación por su apoyo constante. A todos los voluntarios y voluntarias y a los compañeros de Subacuáticas de la Real Sociedad por estar siempre ahí para todo lo que haga falta. Y especialmente, gracias a los participantes por compartir con nosotros su talento, su pasión y su amor por el océano. Ellas, ellos y sus trabajos son el corazón de nuestro Ciclo.
Seguimos en marcha, nos vemos en los cines. Buena mar.
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